No estaba muerto, estaba de parranda y ahora notamos las consecuencias. Parecía que la pandemia había matado el tema del Brexit y su implementación y consecuencias iban a pasar desapercibidas. Nada más lejos de la realidad. La pandemia parece haber acelerado todo.
Como ya vimos la semana pasada, muchos sectores económicos tienen una falta de personal notable y empezamos a ver sus consecuencias en las estanterías de supermercados, en colas de espera en algunos servicios e incluso en algunas tiendas cerradas en el High Street (que fui el sábado y ya vi alguna cerrada o con un tamaño reducido a antes de la pandemia).
Claro, el gobierno de Boris Johnson, lo achaca todo a la pandemia, lo que sea menos aceptar que el Brexit está teniendo consecuencias negativas, pero yo creo sería bastante ignorante no tener en cuenta ambos factores.
Esta semana parece ser que el gobierno va a aligerar cómo conseguir la licencia de transportista para poder tener más mano de obra en este sector.
Yo me pregunto, si conseguir la licencia de transportista requería de una cierta preparación, supongo que era necesario. Si esta preparación ahora es más liviana, ¿podría esto tener consecuencias en el transporte o la seguridad vial? Es una dudilla que me corre por la cabeza.
Otro problema que estamos teniendo este mes es que muchos trabajadores siguen en “Furlough” que sería el equivalente al Expediente de Regulación Temporal de Empleo (ERTE). Vamos que te envían a una especie de paro temporal, cobrando hasta un límite máximo y sin trabajar.
Esto, que es una buena medida para evitar que la gente sea despedida con una mano delante y otra detrás, a la vez hace que algunos trabajos estén estancados ya que esa parte de la población sigue teniendo un contrato de trabajo pero no produce. O quizás produce en B sin que la Her Majesty’s Revenue and Customs (la hacienda británica) se entere, pero ahí no me quiero meter que no quiero tener problemas con la Hacienda de mi querida Elizabeth.
Otra cosa con el Brexit que me ha afectado personalmente. Ahora cuando envío un paquete a España, es más caro que anteriormente, no puedo enviar según que cosas que antes sí y además, en cuanto llega, la persona receptora tiene que pagar aduanas, haciendo que el cómputo final del envío pueda ser más caro que el valor del paquete.
Una cosa que no se puede enviar a la UE sin pasar controles es alimento procedente de animal, si yo quiero enviar las típicas galletas del té y pone que llevan leche… ¿Qué hago? ¿Me arriesgo o no?
Otra cosa es si no me lo aceptan aquí, entonces bien, no sucede nada. Pero si se envía y ¿luego tengo problemas cuando llega allí porque no se podía enviar? Tengo una confusión encima con este tema… Creo que tardaremos un tiempo en tener más información y que todo sea más claro.